Coches sostenibles. Los coches del futuro

El petróleo se acaba y entran las prisas para buscar nuevos modos de energía que puedan suplantarlo. La necesidad agudiza el ingenio cuentan por ahí,siempre y cuando ese ingenio les convenga a los más poderosos. Existen ya diversos modos de coches suplementarios al vehículo que conocemos hoy en día. Coches eléctricos, o que funcionan por metano o aire comprimido.

Religiones curiosas: El Pastafarismo

Si hablamos de religiones curiosas, El Pastafarismo se lleva la palma. Su Dios creador es el Monstruo de Espagueti Volador también llamado Monesvol y su libro sagrado es El Evangelio del Monstruo del Espaguetti Volador. Sus creencias son un poco particulares: Monesvol, invisible e indetectable, creó el universo después de beber mucho, por lo que la borrachera que tenía explica las imperfecciones del mundo creado.

Ausente

El café estaba frío, aunque no tanto como sus manos, pues a nadie tenía que las agarrase. Estaba frío, ya no le interesaba.  Así, se convirtió en verdugo de todos los sueños que escondían tanto esfuerzo, derramándolos por la vía de la inutilidad, muy cerca de donde todos los mediocres descansaban esperando poder salir algún día.

¿A quién le gusta el café frío? Ya no me interesa.

Lo necesitaba caliente, si no, ¿cómo calentaría sus manos?Tanto lo anhelaba que no entendía por qué las tenía tan frías.

 No quería un café exótico o extraordinario, sólo pedía que estuviera caliente, sólo quería calentarse las manos.

                                                                                                                                                                   Kike Sirvent

XXVII

Amar para vivir,

vivir para sufrir,

sufrir para morir,

morir para desaparecer.

Desaparecer para ser recordado,

ser recordado para nunca morir

y así nunca dejar de sufrir.

La crisis

Todo comenzó un día como otro cualquiera, con el sonido de mi despertador, a las 7:35. El mismo despertador que repetiría ese sonidito tan odioso cada 5 minutos hasta las 11 de la mañana. Es la ventaja de ser estudiante de una universidad donde los profesores no valen ni para ser funcionarios: te puedes quedar durmiendo sin remordimiento de conciencia.

Después de un merecido desayuno por mi ajetreada y trabajosa mañana, como buen español, decido encender la tele. Canal tras canal, todos hablaban de lo mismo: ¡Crisis! Crisis viene crisis va. Mis ojos no lo podían creer, el pueblo español, por fin se había dado cuenta de la gran crisis que atraviesa España:

Mensaje a un político con recepción asegurada